Es importante que cualquier persona que tenga disposición o responsabilidad de hacerse cargo de una persona muy mayor tenga información suficiente para hacerlo adecuadamente. Eso implica tener conocimientos de medicina, enfermería y farmacología.
En la etapa avanzada de la vida, los seres humanos suelen requerir atenciones especiales pues sus capacidades físicas y mentales van disminuyendo.
Para que sepas lo necesario para el cuidado de las personas mayores, hemos preparado estos cinco consejos que puedes seguir para asumir adecuadamente este trabajo.
Bien sea porque tengas el objetivo de sacarle provecho profesional a tu vocación de servicio, o te veas en la obligación y responsabilidad de atender a un familiar o amigo que necesite cuidados debido a una avanzada edad, has llegado a la lectura indicada.
Sin más preámbulo, ¡empecemos!
1. Asesoramiento
Lo primero y más importante es contar con un diagnóstico profesional de las necesidades de esa persona.
Luego se debe hacer un recuento de los recursos que se tienen a mano para proveer las atenciones necesarias. Gracias a este “inventario” de recursos disponibles se podrá determinar a qué nivel de comodidad se podrá acceder para cubrir esas necesidades.
Con el diagnóstico profesional y la lista de recursos (que debe incluir no solo las cosas materiales como medicamentos, muebles y espacios, sino también las personas que participarán del cuidado), se debe elaborar un plan de acción realista y satisfactorio para el paciente.
No debe perderse de vista que, para cuidar a las personas mayores, se necesitan muchas acciones diarias, recursos y bastante paciencia y cariño.
2. Realiza acuerdos y rutinas con la familia
Cuando un familiar empieza a necesitar de atención y cuidado especial por ser muy mayor, los demás miembros de la familia deben llegar a acuerdos sobre las responsabilidades que asumirá cada quien.
Es importante aclarar que brindar cuidado de personas mayores es un trabajo a tiempo completo. Si cabe la comparación, es igual de demandante (o incluso más) que atender a un niño pequeño o recién nacido, ya que en durante esta etapa no pueden hacerse cargo de sí mismos en distintas actividades.
Cuando esto sucede, es normal que las familias presenten roces y desacuerdos. Por ello, la recomendación que podemos darte es que se expongan las expectativas de todos, los recursos con los que se cuenta, y que se dividan las tareas a cumplir con el objetivo de darle una calidad de vida digna al adulto mayor.
Pero si ello no es posible, lo mejor es contratar los servicios de un profesional de Enfermería preparado con conocimientos y técnicas multidisciplinarias que le permitirán atender y orientar todo el proceso de cuidado, así como dar indicaciones para que el cambio de la rutina familiar sea productivo y eficaz.
3. Cuidar la higiene
Es muy normal ver a un abuelito pasar la mayor parte del día sentado o acostado en una cama, pues la falta de energía es evidente y los tiempos de recuperación suelen ser muy largos. En este escenario, la higiene y la hidratación son vitales, literalmente.
Ya sea que los cuidados de personas mayores estén dirigidos a adultos mayores sanos o a enfermos, estos dos aspectos tienen que ser parte, sí o sí, de las rutinas diarias de cualquier cuidador.
Por ejemplo, si la limpieza se debe hacer en la cama, es fundamental cuidar zonas como el cuello, tronco, extremidades, axilas, espalda, pies, dedos, área genital y por supuesto, la zona perianal.
Asimismo, una vez realizado el aseo, se debe secar con bastante detenimiento, especialmente las partes donde existen pliegues de piel, ya que estas zonas pueden lesionarse si les queda humedad.
Usar cremas puede ayudar mucho al proceso de regeneración e hidratación de la piel.
4. Adapta la dieta a sus necesidades y condiciones
De la misma manera que una persona en su vejez no es capaz de hacer lo mismo que hacía en sus mejores años, sus órganos ya no tienen el funcionamiento y respuesta que tenían años atrás cuando consumía alimentos no demasiado sanos.
Por ello, el cuidado de personas mayores también pasa por cambiar su dieta y darle un equilibrio que les permita hacer sus actividades rutinarias en las mejores condiciones físicas y mentales posibles.
Un consejo muy útil es que las comidas no sean muy cercanas a la hora de dormir, ya que el cuerpo necesita procesar los alimentos y luego encargarse de descansar.
Asimismo, es importante que se eleve el consumo de proteínas como carnes blancas (pescado o pollo), así como una dieta rica en frutas y verduras.
5. Reduce las posibilidades de caídas
Las caídas son accidentes comunes en las personas mayores debido a la disminución de los reflejos y del equilibrio. Aunado a ello están los problemas de visión, que también entorpecen el desenvolvimiento de las personas mayores y agravan la situación.
Después de una caída muchas veces las personas ancianas empiezan un rápido deterioro de su salud. Es muy importante, por ello, conocer los riesgos y adoptar medidas para reducir las posibilidades de que ocurran.
Aquí unos consejos para que evites las caídas:
- Coloca buena iluminación en el hogar
- Si tiene problemas para desplazarse, debe utilizar bastón, andadera o silla de ruedas
- Agrega pasamanos en escaleras, pasillos y en el baño (principalmente)
- Coloca alfombras antirresbalantes en la cocina, baños y escaleras
- El baño y la cama deben tener buena altura para evitar la necesidad de agacharse
- Evita que niños o mascotas se atraviesen en su camino y puedan hacerle tropezar
- No dejes objetos pequeños en el suelo
¡Ya está! Estos son cinco consejos que podemos darte para facilitar el cuidado de personas mayores. Sin embargo, te recomendamos que, si estás interesado en brindar estos servicios profesionalmente, tienes la excelente opción de estudiar Enfermería en la universidad, no sólo porque aprenderás todo sobre la disciplina, sino que también tendrás el aval de ser un especialista calificado.
Si quieres saber más de la carrera de Enfermería y las oportunidades que puede brindarte en lo personal y financiero, descarga nuestro ebook a continuación.
